La Modernidad, cuya seña de identidad es la tensión dialéctica, se ha construido a través de dos grandes revoluciones: la científica y la industrial. Pero un incontrolado proceso de industrialización, acompañado de un desmedido incremento poblacional, favorecido por un exorbitante omnivorismo energético permitido por una tecnología en constante evolución, ha provocado una crisis ecológica sin precedentes a escala planetaria. Este problema, según anuncia el «ecologismo» se ha convertido en uno de los retos más importantes a los que se enfrenta la humanidad en el siglo XXI. Los debates de este movimiento, tradicionalmente, se han organizado en torno a dos grandes líneas de pensamiento: el ambientalismo y la ecología profunda. Aunque ambas líneas se unen en la lucha por la conservación de la biodiversidad del Planeta, el Movimiento Ecología Profunda, tras un análisis profundo de la situación, concluye que el germen está larvado en la propia Ilustración. Idealizan así un horizonte post-industrial que nos debe conducir hacia el deseado futuro pre-industrial.
Sánchez Yustos, P. (2011). Una visión crítica de la Modernidad: El Movimiento Ecología Profunda. MAD, (24), 93–102. https://doi.org/10.5354/rmad.v0i24.13533